Últimamente me escriben algunos seguidores(as) quejándose de lo que llaman “estar soñando más de la cuenta”. Esta etapa de aislamiento en casa ocasiona dos fenómenos: por un lado tenemos un estrés nuevo y extraordinario y por otro lado hay mayor tiempo libre que permite dormir más. Todo el estrés nos provoca ansiedad y esto a su vez nos genera sueños vivenciales cargados del componente emocional. Los episodios oníricos suelen darse al experimentar el Sueño de Movimiento Ocular Rápido al final de los 6 ciclos normales de sueño que tenemos cada noche; una vez que reparamos biológicamente nuestras células llegan a nuestro cerebro los procesos mentales y con ello los sueños que están íntimamente relacionados con nuestros procesos de memorización. El contenido de estas experiencias solemos recordarlo si lo recapitulamos antes de que pasen 10 minutos después del despertar. Cuando son sueños que mueven nuestros sentimientos hacemos mucho mejor el proceso de recolección que cuando son meros sueños de archivo como lo es una operación aritmética o el cotidiano recordar del qué comí el día de ayer. Si no deseas recordar tanto lo que sueñas intenta ordenar bien tus horarios y no dormir de más, así mismo intenta relajar tus emociones antes de irte a dormir y actívate inmediatamente al despertar para olvidarte al instante de tus emociones nocturnas. Por el contrario si deseas acopiar tus sueños lo que debes de hacer es escribirlos inmediatamente antes de dejar tu cama. #saberdormir #ecloscolchones